3 “Nuestro padre murió en el desierto, pero él no pertenecía al grupo de Coré que se rebeló contra el Señor. Murió a causa de su propio pecado y sin dejar hijos varones.
4 Pero no es justo que el nombre de nuestro padre desaparezca de su clan simplemente porque no tuvo un hijo varón. Danos una porción de tierra a nosotras entre los hermanos de nuestro padre.”
5 Moisés presentó al Señor el caso de estas mujeres,
6 y el Señor le respondió:
7 “Las hijas de Selofhad tienen razón. Asígnales una porción de tierra entre los hermanos de su padre, y que la herencia de su padre pase a ellas.
8 Di además a los israelitas que, si alguien muere sin dejar hijo varón, su herencia pasará a manos de su hija;
9 y si no tiene ninguna hija, dejará su herencia a sus hermanos;