2 “Ordena a los israelitas que no dejen de ofrecerme puntualmente pan y ofrendas quemadas en las fiestas especiales, como ofrendas de olor agradable para mí.
3 “Diles también que estas son las ofrendas que deberán quemar en mi honor: diariamente, sin falta, dos corderos de un año que no tengan ningún defecto.
4 Uno será sacrificado por la mañana y el otro al atardecer.
5 La ofrenda de cereales será de dos kilos de la mejor harina amasada con un litro de aceite de oliva.
6 (Este era el sacrificio que se quemaba continuamente en el monte Sinaí, como ofrenda de olor agradable al Señor.)
7 La ofrenda de vino será de un litro por cada cordero, y se ofrecerá derramándolo en el santuario, en honor del Señor.
8 El segundo cordero será sacrificado al atardecer, y se le añadirá una ofrenda de cereales y una ofrenda de vino iguales a la ofrenda de la mañana. Es una ofrenda de olor agradable, que se quema en honor del Señor.