9 Mientras bajaban del monte, Jesús les ordenó que no contaran a nadie lo que habían visto, hasta que el Hijo del hombre hubiera resucitado.
10 Y, en efecto, ellos guardaron este secreto, aunque discutían qué sería aquello de “resucitar”.
11 Entonces le preguntaron:— ¿Por qué dicen los maestros de la ley que Elías tiene que venir primero?
12 Jesús les contestó:— Es cierto que Elías ha de venir primero para ponerlo todo en orden. Pero, por otra parte, ¿no dicen las Escrituras que el Hijo del hombre ha de sufrir mucho y que ha de ser ultrajado?
13 En cuanto a Elías, les aseguro que ya vino; pero ellos lo maltrataron a su antojo, tal como dicen las Escrituras sobre él.
14 Cuando volvieron a donde estaban los otros discípulos, vieron que había mucha gente reunida con ellos y que estaban discutiendo con los maestros de la ley.
15 Al ver a Jesús, la gente se quedó sorprendida y corrieron todos a saludarlo.