1 Josafat llegó a ser muy rico y poderoso. Hizo un acuerdo con el rey Acab y llegaron a ser consuegros.
2 Entonces Josafat fue a visitar a Acab en Samaria y juntos celebraron sacrificios de ovejas y mucho ganado junto al pueblo. Luego Acab animó a Josafat a atacar a Ramot de Galaad.
3 Acab, el rey de Israel, le preguntó a Josafat, rey de Judá: —¿Irás conmigo a ayudarme a atacar a Ramot de Galaad? Josafat le contestó: —Por supuesto que te ayudaré. Mis soldados están tan dispuestos para la guerra como los tuyos.
4 Pero primero consultemos al SEÑOR para ver lo que él dice.
5 Así que Acab llamó una reunión de los profetas. Había como cuatrocientos profetas y Acab les preguntó: —¿Debemos ir a la guerra contra el ejército de Siria y atacar a Ramot de Galaad o esperar hasta otro momento? Los profetas contestaron: —Ve a luchar ahora porque Dios te va a entregar la ciudad.
6 Pero Josafat les dijo: —¿Hay otros profetas del SEÑOR por acá? Si hay, deberíamos preguntarles lo que dice Dios.