1 Acab tenía setenta hijos en Samaria. Jehú escribió unas cartas y las mandó a Samaria para los líderes y ancianos de la ciudad, a y para los tutores de los hijos de Acab, diciendo:
2 «Reconozco que ustedes están en una posición ventajosa, tienen a los hijos de su señor con ustedes, también los carros, los caballos, una ciudad fortificada y armas. Así que en cuanto les llegue esta carta,
3 elijan al mejor y más capaz de los hijos de su señor y luchen a favor de la dinastía de su señor».
4 Sin embargo, los líderes y los ancianos de Jezrel se atemorizaron y dijeron: «Si dos reyes no pudieron detener a Jehú, mucho menos nosotros».
5 Entonces el administrador del palacio de Acab, el gobernador de la ciudad, los ancianos líderes y los que tenían a cargo a los hijos del rey mandaron este mensaje a Jehú: «Somos sus siervos y haremos lo que usted diga. No vamos a declarar rey a nadie, así que haz lo que consideres mejor».