10 Por lo tanto vas a mantener esta costumbre todos los años y en la misma fecha.
11 »Después, cuando el SEÑOR te lleve a la tierra de los cananeos y te los entregue como se los prometió a ti y a tus antepasados,
12 tendrás que dedicarle todo hijo mayor al SEÑOR y todos los primeros machos que les nazcan a tus animales, porque le pertenecen al SEÑOR.
13 Cada burro recién nacido puede ser rescatado si a cambio se ofrece un cordero en sacrificio. Pero si no se rescata, se sacrificará quebrándole el cuello. Ustedes rescatarán también a todo varón que sea hijo mayor.
14 »Cuando en el futuro tu hijo te pregunte: “¿Qué es esto?”, le responderás: “Con su gran poder, el SEÑOR nos sacó de Egipto y nos liberó de la esclavitud.
15 Cuando el faraón tercamente se rehusó a liberarnos, el SEÑOR mató a todos los hijos mayores que había en Egipto, tanto de la gente como de los animales. Esta es la razón por la cual sacrificamos al SEÑOR las primeras crías de nuestros animales y rescatamos a nuestros hijos”.
16 Por lo tanto, como si tuvieras una marca en la mano o en la frente, esta ceremonia te hará recordar que el SEÑOR con su gran poder nos sacó de Egipto».