8 El animal corre a su guarida y busca refugio allí.
9 La tormenta viene del sur, y los vientos fríos del norte.
10 El aliento de Dios suministra el hielo y congela los océanos.
11 Además de eso, Dios carga una espesa nube con humedad, y hace que de ella salga el rayo.
12 Dios les ordena a las nubes que soplen por toda la tierra. Ellas hacen en la faz de la tierra lo que Dios decide.
13 Él hace que llueva, unas veces para castigar, otras por su tierra y a veces debido a su fiel amor.
14 »Oye esto, Job. Ponte de pie y considera cuidadosamente las maravillas de Dios.