8 »Diles también a los israelitas: “En caso de que un hombre muera sin tener hijo varón, se le asignará su tierra a sus hijas.
9 Si no tiene ninguna hija, deben dársela a sus hermanos.
10 Si no tiene hermanos, deben dársela a los hermanos de su padre.
11 Si su padre no tiene hermanos, entonces deben darle su tierra al pariente más cercano de su tribu, quien la heredará. Ese será el procedimiento legal que deben seguir los israelitas tal como el SEÑOR se lo ordenó a Moisés”».
12 El SEÑOR le dijo a Moisés: —Sube a ese monte en las montañas de Abarín y mira la tierra que le he dado a los israelitas.
13 Cuando la hayas visto, tú también te reunirás con tus antepasados así como sucedió con tu hermano Aarón,
14 porque ustedes desobedecieron mi mandato en el desierto de Sin, cuando la gente se rebeló contra mí. Ustedes no honraron mi santidad ante los israelitas cuando ellos pidieron agua. (Esto hace referencia a las aguas de Meribá cerca de Cades en el desierto de Sin).