4 La gente dejará de escuchar la verdad y comenzará a dejarse guiar por historias falsas.
5 Pero no pierdas la calma, soporta los sufrimientos y dedícate a contar la buena noticia y a cumplir los deberes de un siervo de Dios.
6 Se acerca el momento de mi muerte; mi vida ya se está ofreciendo como un sacrificio a Dios.
7 Me fue bien en la competencia: he peleado bien, he terminado la carrera y no he perdido la fe.
8 Ahora me espera una corona que recibiré como muestra de aprobación. El Señor, juez justo, me la dará ese día, y también a todos los que esperan con anhelo su llegada.
9 Ven tan pronto como puedas.
10 Demas me abandonó porque amaba las cosas de este mundo y se fue a Tesalónica. Crescente se fue a Galacia y Tito a Dalmacia.