20 Juan respondió sin titubear y sin ocultar la verdad: —Yo no soy el Mesías.
21 También le preguntaron: —Entonces, ¿quién eres? ¿Eres Elías? Juan respondió: —No lo soy. —¿Eres tú el Profeta? Él contestó: —No.
22 Entonces le dijeron: —¿Quién eres tú? Dínoslo y así podremos llevar alguna respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices sobre ti mismo?
23 Él dijo: —Yo soy el que grita en el desierto: “¡Enderecen el camino para el Señor!”, como dijo el profeta Isaías.
24 Los fariseos habían mandado a esos hombres.
25 Ellos le preguntaron: —Si tú no eres el Mesías, ni Elías, ni el Profeta, entonces, ¿por qué bautizas?
26 Juan les respondió: —Yo bautizo con agua, pero entre ustedes hay alguien que no conocen y