5 Entonces el diablo llevó a Jesús a la ciudad santa y lo puso en lo más alto de un extremo del área del templo,
6 y le dijo: —Si eres Hijo de Dios, tírate abajo desde aquí porque está escrito: “Él mandará a sus ángeles que te cuiden. Sus manos te rescatarán para que ni siquiera te lastimes los pies contra las piedras”.
7 Jesús le dijo: —Pero también está escrito: “No pongas a prueba al Señor tu Dios”.
8 Después el diablo llevó a Jesús a una montaña muy alta y le mostró todos los reinos del mundo con toda su grandeza.
9 El diablo le dijo: —Te daré todo esto si te arrodillas y me adoras.
10 Jesús le dijo: —¡Largo de aquí Satanás! Porque está escrito: “Adora al Señor tu Dios y sírvele solamente a él”.
11 Entonces el diablo se fue, y los ángeles vinieron a cuidar a Jesús.