10 Al resto del pueblo lo colocó al mando de su hermano Abisai y lo puso en orden de batalla contra los Amonitas.
11 Y dijo: "Si los Arameos son demasiado fuertes para mí, entonces tú me ayudarás, y si los Amonitas son demasiado fuertes para ti, entonces vendré en tu ayuda.
12 Esfuérzate, y mostrémonos valientes por amor a nuestro pueblo y por amor a las ciudades de nuestro Dios; y que el Señor haga lo que Le parezca bien."
13 Entonces Joab se acercó con el pueblo que estaba con él para pelear contra los Arameos, y éstos huyeron delante de él.
14 Cuando los Amonitas vieron que los Arameos huían, ellos también huyeron delante de Abisai y entraron en la ciudad. Entonces Joab se volvió de pelear contra los Amonitas y vino a Jerusalén.
15 Al ver los Arameos que habían sido derrotados por Israel, volvieron a concentrarse.
16 Hadad Ezer mandó sacar a los Arameos que estaban al otro lado del Río (el Eufrates) y fueron a Helam; y Sobac, comandante del ejército de Hadad Ezer, iba al frente de ellos.