24 Su corazón es firme como una piedra, y fuerte como una pieza de la muela de abajo.
25 De su grandeza tienen temor los fuertes, y por quebrantamientos se remueven el pecado.
26 Cuando alguno lo alcanzare, ni espada, ni lanza, ni dardo, ni coselete durará contra él.
27 El hierro estima por paja, y el bronce por leño podrido.
28 Saeta no le hace huir; las piedras de honda se le tornan aristas.
29 Tiene toda arma por hojarasca, y del blandir de la pica se burla.
30 Por debajo tiene vasos de barro quebrados; imprime su agudez en el suelo.