20 Y la persona que comiere la carne del sacrificio de paz, el cual es del SEÑOR, estando inmunda, aquella persona será cortada de su pueblo.
21 Además, la persona que tocare alguna cosa inmunda, en inmundicia de hombre, o en animal inmundo, o en cualquier abominación inmunda, y comiere de la carne del sacrificio de la paz, el cual es del SEÑOR, aquella persona será cortada de su pueblo.
22 Habló aún el SEÑOR a Moisés, diciendo:
23 Habla a los hijos de Israel, diciendo: Ningún sebo de buey, ni de cordero, ni de cabra, comeréis.
24 El sebo de animal mortecino, y el sebo del que fue arrebatado de fieras, se aparejará para cualquier otro uso, mas no lo comeréis.
25 Porque cualquiera que comiere sebo de animal, del cual se ofrece al SEÑOR ofrenda encendida, la persona que lo comiere, será cortada de su pueblo.
26 Además, ninguna sangre comeréis en ningún lugar donde habitéis, así de aves como de bestias.