2 Me alegraré y me regocijaré en ti; cantaré a tu nombre, oh Altísimo;
3 por haber sido mis enemigos vueltos atrás; caerán y perecerán delante de ti.
4 Porque has hecho mi juicio y mi causa; te has sentado en silla juzgando justicia.
5 Reprendiste los gentiles, destruiste al malo, raíste el nombre de ellos para siempre y eternalmente.
6 Oh enemigo, acabados son para siempre los asolamientos; y las ciudades que derribaste, su memoria pereció con ellas.
7 Mas el SEÑOR permanecerá para siempre; ha dispuesto su trono para juicio.
8 Y él juzgará el mundo con justicia; juzgará los pueblos con rectitud.