2 Honra a tu padre y a tu madre, (que es el primer mandamiento con promesa),
3 para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.
4 Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos; sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.
5 Siervos, obedeced a vuestros amos según la carne con temor y temblor, con sencillez de vuestro corazón, como al Cristo;
6 no sirviendo para ser visto, como los que agradan solamente a los hombres; sino como siervos del Cristo, haciendo de ánimo la voluntad de Dios;
7 sirviendo con buena voluntad, como al Señor, y no a los hombres;
8 sabiendo que el bien que cada uno hiciere, esto recibirá del Señor, sea siervo o sea libre.