9 Tanto a Aarón como a ellos, les ajustarás el cinturón y les acomodarás el turbante. De esta manera les darás plena autoridad, y su sacerdocio será una ley permanente.
10 “Después lleva el becerro hasta la tienda del encuentro, para que Aarón y sus hijos pongan las manos sobre la cabeza del animal,
11 y allí, ante el Señor, a la entrada de la tienda del encuentro, mata el becerro.
12 Toma entonces con el dedo un poco de su sangre y unta con ella los cuernos del altar, y derrama al pie del altar toda la sangre que quede.
13 A los intestinos, hígados y riñones, quítales la grasa de que están cubiertos y quémala en el altar;
14 pero la carne, la piel y el estiércol del becerro quémalos en las afueras del campamento, pues es un sacrificio por el pecado.
15 “Toma uno de los dos carneros, y que Aarón y sus hijos le pongan las manos sobre la cabeza.