1 El Señor se dirigió a mí y me dijo:
2 “Habla en mi nombre contra los profetas de Israel, esos profetas que hablan por su propia cuenta, y diles: ‘Oíd la palabra del Señor:
3 ¡Ay de los profetas estúpidos que siguen su propia inspiración y no tienen verdaderas visiones!
4 Tus profetas, Israel, son como zorras que viven entre ruinas.
5 No han hecho nada para defender a Israel, para que pueda resistir en la batalla cuando venga el día del Señor.
6 Sus visiones son falsas y sus profecías son mentira. Dicen que hablan de mi parte, pero yo no los he enviado. ¡Y esperan que sus palabras se cumplan!
7 ¡Vuestras visiones son falsas! ¡Vuestras profecías, mentira! Decís que habláis de mi parte, pero yo no he dicho nada.