8 me enfrentaré con ese hombre y le daré un castigo ejemplar, algo de lo que todos hablen, y lo eliminaré de entre mi pueblo. Entonces reconoceréis que yo soy el Señor.
9 “Y si un profeta da un mensaje falso, es porque yo, el Señor, engañé a ese profeta; y levantaré mi mano para castigarlo y lo eliminaré de mi pueblo Israel.
10 Tanto el hombre que hace la consulta como el profeta serán castigados por su pecado,
11 para que el pueblo de Israel no vuelva jamás a apartarse de mí ni a mancharse con esos crímenes. Ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios. Yo, el Señor, lo afirmo.”
12 El Señor se dirigió a mí y me dijo:
13 “Si un país peca contra mí y me es infiel, yo levantaré la mano para castigarlo y le quitaré sus provisiones de alimento; enviaré hambre sobre él, y haré que mueran hombres y animales.
14 Y si en ese país vivieran Noé, Danel y Job, solo ellos tres se salvarían, por ser justos. Yo, el Señor, lo afirmo.