8 Pues yo voy a dejar la sangre allí,sobre la roca desnuda,de manera que no se pueda cubrir,para que mi ira se encienday se haga justicia.
9 ‘Porque el Señor dice:¡Ay de la ciudad asesina!Yo mismo voy a hacer una hoguera.
10 Y tú trae mucha leña, enciende el fuegoy cuece bien la carne,hasta que se acabe el caldo y se quemen los huesos;
11 pon luego la olla vacía sobre el fuego,hasta que el cobre se ponga al rojo vivoy quede limpio de sus impurezas;¡hasta que el moho desaparezca!
12 Sin embargo, tan enmohecido estáque no se limpia ni con fuego.
13 ‘Jerusalén, yo he querido limpiarte de la impureza de tu libertinaje, pero no has quedado limpia. Sólo quedarás limpia cuando descargue mi ira sobre ti.
14 Yo, el Señor, lo he dicho, y así será. Yo mismo lo haré: no dejaré de cumplirlo. No tendré compasión ni me arrepentiré. Te castigaré por tu conducta y tus acciones. Yo, el Señor, lo afirmo.’ ”