9 Pero ellos le contestaron:–¡Hazte a un lado! Solo faltaba que un extranjero como tú quisiera mandar sobre nosotros. ¡Pues ahora vamos a tratarte peor que a ellos!En seguida comenzaron a maltratar a Lot, y se acercaron a la puerta para echarla abajo;
10 pero los visitantes de Lot alargaron la mano y lo metieron dentro de la casa; luego cerraron la puerta
11 e hicieron que se quedasen ciegos los hombres que estaban fuera. Todos, desde el más joven hasta el más viejo, quedaron ciegos. Y se cansaban de andar buscando la puerta.
12 Entonces los visitantes dijeron a Lot:–¿Tienes más familiares aquí? Toma a tus hijos, hijas y yernos, y todo lo que tengas en esta ciudad; sácalos y llévatelos lejos de aquí,
13 porque vamos a destruir este lugar. Ya son muchas las quejas que el Señor ha tenido contra la gente de esta ciudad, y por eso nos ha enviado a destruirla.
14 Entonces Lot fue a ver a sus yernos, o sea, a los prometidos de sus hijas, y les dijo:–¡Levantaos y marchaos de aquí, porque el Señor va a destruir esta ciudad!Pero sus yernos no tomaron en serio lo que Lot les decía.
15 Como ya estaba amaneciendo, los ángeles dijeron a Lot:–¡De prisa! Levántate y llévate de aquí a tu esposa y a tus dos hijas, si no quieres morir cuando castiguemos a la ciudad.