1 Jacob siguió su camino y se fue a la tierra de los orientales.
2 En el campo vio un pozo, cerca del cual descansaban tres rebaños de ovejas, porque los animales bebían agua de él. Sobre la boca del pozo había una piedra muy grande,
3 y cuando todos los rebaños se juntaban allí, los pastores quitaban la piedra para dar agua a las ovejas, y luego volvían a tapar el pozo.
4 Jacob preguntó a los pastores:–¿De dónde sois, amigos míos?–Somos de Harán –contestaron ellos.