7 El Señor, el redentor,el Dios Santo de Israel,dice al pueblo que ha sido totalmente despreciado,al que los otros pueblos aborrecen,al que ha sido esclavo de los tiranos:“Cuando los reyes y los príncipes te vean,se levantarán y se inclinarán delante de ti,porque yo, el Señor, el Dios Santo de Israel,te elegí y cumplo mis promesas.”
8 El Señor dice:“Vino el momento de mostrar mi bondad, y te respondí;llegó el día de la salvación, y te ayudé.Yo te protegípara establecer por ti mi pacto con el pueblo,para reconstruir el país,para hacer que tomen posesión de las tierras arrasadas,
9 para decir a los presos: ‘Quedáis libres’,y a los que están en la oscuridad: ‘Dejaos ver.’Junto a todos los caminos encontrarán pastos,y en cualquier monte desiertotendrán alimento para su ganado.
10 “No tendrán hambre ni sed,ni los molestará el sol ni el calor,porque yo los amo y los guío,y los llevaré a manantiales de agua.
11 Abriré un camino a través de las montañasy haré que se allanen los senderos.”
12 ¡Mirad! Vienen de muy lejos:unos del norte, otros de occidente,otros de la región de Asuán.
13 ¡Cielo, grita de alegría!¡Tierra, llénate de gozo!¡Montes, lanzad gritos de felicidad!,porque el Señor ha consolado a su pueblo,ha tenido compasión de él en su aflicción.