11 Todos sus habitantes lloranmientras van en busca de alimentos;dieron sus riquezas a cambio de comidapara poder sobrevivir.¡Mira, Señor, mi ruina!¡Considera mi desgracia!
12 ¡Vosotros, los que vais por el camino,deteneos a pensarsi hay dolor como el mío,que tanto me hace sufrir!¡El Señor me mandó esta aflicciónal encenderse su enojo!
13 El Señor lanzó desde lo altoun fuego que me ha llegado hasta los huesos;tendió una trampa a mi pasoy me hizo volver atrás;me ha entregado a cada instanteal abandono y al sufrimiento.
14 Mis pecados los ha visto el Señor,me han sido atados por él mismoy pesan como un yugo sobre mí.¡Acaban con mis fuerzas!El Señor me ha puesto en manos de gentefrente a la cual no puedo resistir.
15 El Señor arrojó lejos de mía todos los valientes que me defendían.Lanzó un ejército a atacarme,para acabar con mis hombres más valientes.¡El Señor ha aplastado a la virginal Judácomo se aplastan las uvas en el lagar!
16 Estas cosas me hacen llorar.Mis ojos se llenan de lágrimas,pues no tengo a nadie que me consuele,a nadie que me dé nuevo aliento.Entre ruinas han quedado mis hijos,porque pudo más el enemigo que nosotros.
17 Sión extiende las manos suplicante,pero no hay quien la consuele.El Señor ha ordenado que a Jacoblo rodeen sus enemigos;Jerusalén es para ellosobjeto de desprecio.