2 Por medio de sus profetas, Dios ya lo había prometido en las santas Escrituras.
3-4 Es el mensaje relativo a su Hijo Jesucristo, nuestro Señor, que como hombre fue descendiente del rey David, pero como espíritu santificador y a partir de su resurrección fue declarado Hijo de Dios y se le dieron plenos poderes.
5 Por medio de Jesucristo, Dios me ha concedido el privilegio de ser su apóstol, para que en todas las naciones haya quienes crean en él y le obedezcan.
6-7 Entre ellos estáis también vosotros, que vivís en la ciudad de Roma. Dios os ama, y os ha llamado a ser de Jesucristo y formar parte del pueblo santo. Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo derramen su gracia y su paz sobre vosotros.
8 En primer lugar, por medio de Jesucristo doy gracias a mi Dios por cada uno de vosotros, porque en todas partes se habla de vuestra fe.
9 Dios, a quien sirvo con todo mi corazón anunciando el evangelio de su Hijo, es testigo de que continuamente os recuerdo en mis oraciones;
10 y pido siempre a Dios que, si es su voluntad, me conceda ir por fin a visitaros.