1 Entre tanto, Judas Macabeo y sus compañeros entraron secretamente en las aldeas y empezaron a llamar a sus parientes, y reuniendo a otros que permanecían fieles al judaísmo, juntaron unos seis mil.
2 Pedían al Señor que mirara por el pueblo a quien todos perseguían, que tuviera compasión del templo profanado por hombres impíos,
3 que se compadeciera de la ciudad devastada y a punto de ser arrasada, que oyera el clamor de la sangre que le pedía a gritos que hiciera justicia,
4 que se acordara de la muerte injusta de niños inocentes y de los insultos contra su nombre, y que mostrara su odio contra el mal.