33-36 [12t] Si alguna ciudad o región no cumple estas órdenes, será terriblemente destruida con las armas y el fuego. Ningún hombre volverá a acercarse a ella, y hasta las fieras y las aves sentirán horror de ese lugar.[
37 [13] »Las copias de la orden deben ser publicadas a la vista de todos en el reino, para que los judíos estén preparados aquel día para pelear con sus enemigos.»
38 [14] Los correos partieron a toda prisa, a caballo, para cumplir lo que el rey había ordenado, y el edicto fue publicado también en Susa.
39 [15] Mardoqueo salió del palacio vestido con una túnica real, una corona de oro y un turbante de lino color púrpura. Al verlo, la gente de Susa se alegró,
40 [16] y para los judíos todo fue luz y alegría.
41 [17] En todas las ciudades y provincias donde se publicó el decreto, los judíos se llenaron de gozo y alegría, y lo celebraron con banquetes. Además, por miedo a los judíos, muchos hombres de aquellas naciones se circuncidaron y se hicieron judíos también.