30 Después Lot tuvo miedo de quedarse en Sóar y se fue con sus dos hijas a la región montañosa, donde los tres se quedaron a vivir en una cueva.
31 Un día, la hija mayor le dijo a la menor:—Nuestro padre ya está viejo, y no hay en toda esta región ningún hombre que se case con nosotras, tal como se acostumbra;
32 así que vamos a emborracharlo y a acostarnos con él para tener hijos suyos.
33 Esa misma noche le dieron vino a su padre, y la mayor se acostó con él; pero su padre no se dio cuenta cuando ella se acostó ni cuando se levantó.
34 Al día siguiente, la mayor le dijo a la menor:—Mira, anoche me acosté con nuestro padre, así que esta noche también lo emborracharemos para que te acuestes con él; así las dos tendremos hijos suyos.
35 Esa noche volvieron a darle vino a su padre, y la menor se acostó con él; pero Lot tampoco se dio cuenta cuando ella se acostó ni cuando se levantó.
36 Así las dos hijas de Lot quedaron embarazadas por parte de su padre.