8 —Sólo iré si tú vienes conmigo —contestó Barac—. Pero si tú no vienes, yo no iré.
9 —Pues iré contigo —respondió Débora—. Sólo que la gloria de esta campaña que vas a emprender no será para ti, porque el Señor entregará a Sísara en manos de una mujer.Entonces Débora fue con Barac a Quedes.
10 Allí Barac llamó a las tribus de Zabulón y Neftalí, y reunió bajo su mando un ejército de diez mil hombres. Débora iba con él.
11 Cerca de Quedes, junto a la encina de Saanaim, estaba el campamento de Héber el quenita, quien se había separado de los demás quenitas que, como él, descendían de Hobab, el suegro de Moisés.
12 Cuando Sísara supo que Barac había subido al monte Tabor,
13 reunió sus novecientos carros de hierro y a todos sus soldados, y marchó con ellos desde Haróset-goím hasta el arroyo de Quisón.
14 Entonces Débora le dijo a Barac:—¡Adelante, que ahora es cuando el Señor va a entregar en tus manos a Sísara! ¡Ya el Señor va al frente de tus soldados!Barac bajó del monte Tabor con sus diez mil soldados,