11 Sin embargo, en la vida cristiana, ni el hombre existe sin la mujer, ni la mujer sin el hombre.
12 Pues aunque es verdad que la mujer fue formada del hombre, también es cierto que el hombre nace de la mujer; y todo tiene su origen en Dios.
13 Ustedes mismos juzguen si está bien que la mujer ore a Dios sin cubrirse la cabeza.
14 La naturaleza misma nos enseña que es una vergüenza que el hombre se deje crecer el cabello;
15 en cambio, es una honra para la mujer dejárselo crecer; porque a ella se le ha dado el cabello largo para que le cubra la cabeza.
16 En todo caso, si alguno quiere discutir este asunto, debe saber que ni nosotros ni las iglesias de Dios conocemos otra costumbre.
17 Al escribirles lo que sigue, no puedo felicitarlos, pues parece que sus reuniones les hacen daño en vez de hacerles bien.