3 Un día, a eso de las tres de la tarde, tuvo una visión:Vio claramente a un ángel de Dios que entraba donde él estaba y le decía: «¡Cornelio!»
4 Cornelio se quedó mirando al ángel, y con mucho miedo le preguntó: «¿Qué se te ofrece, señor?» El ángel le dijo: «Dios tiene presentes tus oraciones y lo que has hecho para ayudar a los necesitados.
5 Manda a alguien a la ciudad de Jope para que haga venir a un hombre llamado Simón, que también es conocido como Pedro.
6 Está alojado en casa de otro Simón, un curtidor que vive junto al mar.»
7 Cuando se fue el ángel que le había hablado, Cornelio llamó a dos de sus sirvientes y a un soldado que era muy religioso y de su confianza,
8 y después de contárselo todo, los envió a Jope.
9 Al día siguiente, a eso del mediodía, mientras iban de camino cerca de Jope, Pedro subió a orar a la azotea de la casa.