6 La gente se reunía, y todos escuchaban con atención lo que decía Felipe, pues veían las señales milagrosas hechas por él.
7 Muchas personas que tenían espíritus impuros eran sanadas, y los espíritus salían de ellas gritando; y también muchos paralíticos y tullidos eran sanados.
8 Por esta causa hubo gran alegría en aquel pueblo.
9 Pero había allí un hombre llamado Simón, que antes había practicado la brujería y que había engañado a la gente de Samaria haciéndose pasar por una persona importante.
10 Todos, desde el más pequeño hasta el más grande, lo escuchaban atentamente y decían: «Éste es a quien llaman “el gran poder de Dios”.»
11 Y le hacían caso, porque con su brujería los había engañado durante mucho tiempo.
12 Pero cuando creyeron en la buena noticia que Felipe les anunciaba acerca del reino de Dios y de Jesucristo, tanto hombres como mujeres se bautizaron.