16 Al ver esto, todos tuvieron miedo y comenzaron a alabar a Dios, diciendo:—Un gran profeta ha aparecido entre nosotros.También decían:—Dios ha venido a ayudar a su pueblo.
17 Y por toda Judea y sus alrededores se supo lo que había hecho Jesús.
18 Juan tuvo noticias de todas estas cosas, pues sus seguidores se las contaron. Llamó a dos de ellos
19 y los envió al Señor, a preguntarle si él era de veras el que había de venir o si debían esperar a otro.
20 Los enviados de Juan se acercaron, pues, a Jesús y le dijeron:—Juan el Bautista nos ha mandado a preguntarte si tú eres el que ha de venir, o si debemos esperar a otro.
21 En aquel mismo momento Jesús curó a muchas personas de sus enfermedades y sufrimientos, y de los espíritus malignos, y dio la vista a muchos ciegos.
22 Luego les contestó:—Vayan y díganle a Juan lo que han visto y oído. Cuéntenle que los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos quedan limpios de su enfermedad, los sordos oyen, los muertos vuelven a la vida y a los pobres se les anuncia la buena noticia.