16 y el que esté en el campo, que no regrese ni aun a recoger su capa.
17 ¡Pobres mujeres aquellas que en tales días estén embarazadas o tengan niños de pecho!
18 Pidan ustedes a Dios que esto no suceda en el invierno,
19 porque serán días de un sufrimiento como nunca lo ha habido desde que Dios, en el principio, hizo el mundo hasta ahora, ni lo habrá después.
20 Y si el Señor no acortara ese tiempo, no se salvaría nadie; pero lo ha acortado por amor a los suyos, a los que él ha escogido.
21 »Si entonces alguien les dice a ustedes: “Miren, aquí está el Mesías”, o “Miren, allí está”, no lo crean.
22 Pues vendrán falsos mesías y falsos profetas; y harán señales y milagros, para engañar, de ser posible, hasta a los que Dios mismo ha escogido.