8 Jesús se dio cuenta, y les dijo:—¿Por qué dicen que no tienen pan? ¡Qué poca fe tienen ustedes!
9 ¿Todavía no entienden, ni se acuerdan de los cinco panes que repartí entre cinco mil hombres, y cuántas canastas recogieron?
10 ¿Ni se acuerdan tampoco de los siete panes que repartí entre cuatro mil, y cuántas canastas recogieron?
11 ¿Cómo no se dan cuenta ustedes de que yo no estaba hablando del pan? Cuídense de la levadura de los fariseos y de los saduceos.
12 Entonces comprendieron que Jesús no les había dicho que se cuidaran de la levadura del pan, sino de la enseñanza de los fariseos y de los saduceos.
13 Cuando Jesús llegó a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos:—¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?
14 Ellos contestaron:—Algunos dicen que Juan el Bautista; otros dicen que Elías, y otros dicen que Jeremías o algún otro profeta.