12 deberá llevarla a su casa y hará que se rape la cabeza, se corte las uñas,
13 se quite el vestido que llevaba cuando cayó prisionera y se quede a vivir en casa de él, llorando a sus padres durante todo un mes. Después de esto, el israelita podrá entrar en relaciones con ella: él será su marido y ella será su mujer.
14 Si después resulta que no le gusta, podrá dejarla en libertad; pero no podrá venderla por dinero ni tratarla como esclava, ya que la ha deshonrado.
15 “Si un hombre tiene dos mujeres, y ama a una y a la otra no, pero las dos le dan hijos, y si el hijo primogénito es de la mujer a la que no ama,
16 cuando llegue el día en que ese hombre reparta sus bienes entre sus hijos no podrá otorgar los derechos de primogenitura al de la mujer que ama, pues perjudicaría al hijo de la mujer aborrecida, que es realmente el primogénito.
17 Tendrá que reconocer a este como primogénito y darle una doble parte de los bienes que le corresponden, porque él es el primer fruto de su fuerza y tiene todos los derechos de la primogenitura.
18 “Si alguien tiene un hijo desobediente y rebelde que no hace caso a lo que le dicen sus padres, y ni siquiera les obedece cuando le castigan,