18 ¿No os basta con comeros los mejores pastos, sino que tenéis que pisotear el que queda? Bebéis el agua clara y enturbiáis el resto con las patas.
19 Y mis ovejas tienen que comer los pastos que vosotras habéis pisoteado y beber el agua que habéis enturbiado.
20 Por eso yo, el Señor, os digo: Voy a hacer justicia entre las ovejas gordas y las flacas.
21 Habéis alejado a empujones a las débiles, las habéis atacado a cornadas y las habéis hecho huir.
22 Pero yo salvaré a mis ovejas. No dejaré que las sigan robando. Haré justicia entre las ovejas.
23 Haré que vuelva mi siervo David y lo pondré como único pastor, y él las cuidará. Él será su pastor.
24 Yo, el Señor, seré su Dios, y mi siervo David será su jefe. Yo, el Señor, he hablado.