11 las proteges el día en que las plantas,y haces que brote la semilla al día siguiente.Pero cuando vengan la enfermedad y el mal incurable,se perderá la cosecha.
12 ¡Oíd el estruendo de pueblos numerosos,estruendo como el que produce el mar!Es el rugido que lanzan las naciones,como el rugido de aguas impetuosas.
13 Pero cuando Dios los reprende,salen huyendo lejos,como la paja que el viento se lleva por los monteso como el cardo que arrastra el huracán.
14 Por la tarde parecen terribles,pero antes de amanecer dejan de existir.En eso paran los que nos saquean;así terminan los que nos arruinan.