2 Terrible es la visión que Dios me ha mostrado:el traidor traiciona,el destructor destruye.¡Levántate, Elam!¡Medos, al asalto!¡No permito más quejas!
3 Mi cuerpo se estremece,me retuerzo de dolor como mujer de parto,la angustia no me deja oir,el terror me impide ver.
4 Tengo la mente confundida,me estremezco de terror.El fresco del atardecer, que tanto me gustaba,se ha vuelto para mí algo terrible.
5 La mesa ya está puesta, tendidas las alfombras,el banquete ha comenzado.¡En pie, capitanes: sacad brillo a los escudos!
6 Porque el Señor me ha dicho:“Ve y coloca un centinelaque dé aviso de todo cuanto vea.
7 Si ve carros tirados por parejas de caballos,o gente montada en asnos o camellos,que mire con mucha atención.”
8 Y el que vigilaba gritó:“En mi puesto, Señor,permanezco todo el día,y noche tras noche me mantengo vigilante.