12 –o sea, todo el becerro–, los sacará a un lugar limpio fuera del campamento, donde se echa la ceniza, y allí, sobre el montón de ceniza, pondrá leña y les prenderá fuego.
13 “Si toda la comunidad israelita hace algo malo sin quererlo, y ninguno de ellos se da cuenta de que su acción va en contra de los mandamientos del Señor y que así se han hecho culpables,
14 en cuanto se conozca el pecado que han cometido deberán ofrecer todos juntos un becerro, como sacrificio por el pecado. Lo llevarán ante la tienda del encuentro,
15 donde los ancianos de la comunidad pondrán sus manos sobre la cabeza del becerro, ante el Señor, y allí mismo lo degollarán.
16 Luego el sacerdote principal llevará un poco de la sangre del becerro a la tienda del encuentro,
17 mojará su dedo en la sangre y la rociará siete veces ante el Señor, frente al velo.
18 Untará con un poco de sangre los cuernos del altar que está ante el Señor, en la tienda del encuentro. Y toda la sangre restante la derramará al pie del altar de los holocaustos, el cual está a la entrada de la tienda del encuentro.