19 Orad también por mí, para que Dios me dé las palabras que debo decir, y para que pueda hablar con valor y dar así a conocer el designio secreto de Dios contenido en el evangelio.
20 Dios me ha enviado como embajador de este mensaje por el cual ahora estoy preso. Orad para que yo hable de él sin temor alguno.
21 Tíquico, nuestro querido hermano y fiel ayudante en la obra del Señor, os llevará todas las noticias que se refieren a mí y a lo que estoy haciendo.
22 Por eso os lo envío, para que os diga cómo estamos y para que, de esa manera, os anime.
23 Que Dios el Padre, y el Señor Jesucristo, os den a los hermanos paz y amor, con fe;
24 y que den su gracia a todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con un amor inalterable.