28 ¡Padre, glorifica tu nombre!”Entonces vino una voz del cielo, que decía: “¡Ya lo he glorificado, y lo glorificaré otra vez!”
29 Al oir esto, la gente que estaba allí decía que había sido un trueno, aunque algunos afirmaban:–Un ángel le ha hablado.
30 Jesús les dijo:–No ha sido por mí por quien se ha oído esta voz, sino por vosotros.
31 Ahora va a ser juzgado el mundo. ¡Ahora va a ser expulsado el que manda en este mundo!
32 Pero cuando yo sea levantado de la tierra, atraeré a todos a mí.
33 Con esto daba a entender de qué forma había de morir.
34 La gente le contestó:–Por la ley sabemos que el Mesías vivirá para siempre: ¿cómo, pues, dices tú que el Hijo del hombre ha de ser levantado? ¿Quién es ese Hijo del hombre?