15 Durante la fiesta, el gobernador tenía la costumbre de poner en libertad a un preso, el que la gente escogía.
16 Había entonces un preso famoso llamado Jesús Barrabás.
17 Estando la gente reunida, Pilato preguntó:–¿A quién queréis que os ponga en libertad, a Jesús Barrabás o a Jesús, a quien llaman el Mesías?
18 Porque comprendía que lo habían entregado por envidia.
19 Mientras Pilato estaba sentado en el tribunal, su esposa mandó a decirle:–No te metas con ese hombre justo, porque anoche tuve un sueño horrible por causa suya.
20 Pero los jefes de los sacerdotes y los ancianos convencieron a la multitud para que pidiera la libertad de Barrabás y la muerte de Jesús.
21 El gobernador repitió la pregunta:–¿A cuál de los dos queréis que os ponga en libertad?Ellos dijeron:–¡A Barrabás!