20 En efecto, el libro de los Salmos dice:“Que su casa se vuelva un desierto,y que nadie viva en ella.”Y también:“Que otro ocupe su cargo.”
21 »Tenemos aquí hombres que nos han acompañado todo el tiempo que el Señor Jesús estuvo entre nosotros,
22 desde que fue bautizado por Juan hasta que subió al cielo. Es necesario, pues, que uno de ellos sea agregado a nosotros, para que junto con nosotros dé testimonio de que Jesús resucitó.»
23 Entonces propusieron a dos: a José, llamado Barsabás, y llamado también Justo, y a Matías.
24 Y oraron así: «Señor, tú que conoces los corazones de todos, muéstranos cuál de estos dos has escogido
25 para que tome a su cargo el servicio de apóstol que Judas perdió por su pecado, cuando se fue al lugar que le correspondía.»
26 Lo echaron a la suerte, y ésta favoreció a Matías, quien desde aquel momento quedó agregado a los once apóstoles.