3 Y enviaron a llamarlo. Entonces vino con todo Israel, y hablaron a Roboam, diciendo:
4 Tu padre hizo pesado nuestro yugo; ahora pues, aligera la dura servidumbre de tu padre y el pesado yugo que puso sobre nosotros y te serviremos.
5 Entonces él les dijo: Volved otra vez a mí dentro de tres días. Y el pueblo se fue.
6 El rey Roboam pidió consejo a los ancianos que habían servido a su padre Salomón cuando aún vivía, diciendo: ¿Qué me aconsejáis que responda a este pueblo?
7 Y ellos le respondieron, diciendo: Si eres bueno con este pueblo y les complaces y les dices buenas palabras, entonces ellos serán tus siervos para siempre.
8 Pero él abandonó el consejo que le habían dado los ancianos, y pidió consejo a los jóvenes que se habían criado con él y le servían.
9 Y les dijo: ¿Qué aconsejáis que respondamos a este pueblo que me ha hablado, diciendo: "Aligera el yugo que tu padre puso sobre nosotros"?