23 Y ella les dijo: Así dice el Señor, Dios de Israel: "Decid al hombre que os ha enviado a mí:
24 así dice el Señor: 'He aquí, voy a traer mal sobre este lugar y sobre sus habitantes, es decir, todas las maldiciones escritas en el libro que ellos han leído en presencia del rey de Judá.
25 'Por cuanto me han abandonado y han quemado incienso a otros dioses para provocarme a ira con todas las obras de sus manos, por tanto mi furor se derramará sobre este lugar, y no se apagará.'"
26 Pero al rey de Judá que os envió a consultar al Señor, así le diréis: "Así dice el Señor, Dios de Israel: 'En cuanto a las palabras que has oído,
27 porque se enterneció tu corazón y te humillaste delante de Dios cuando oíste sus palabras contra este lugar y contra sus habitantes, y te humillaste delante de mí, y rasgaste tus vestidos y lloraste delante de mí, ciertamente te he oído--declara el Señor.
28 'He aquí, te reuniré con tus padres y serás recogido en tu sepultura en paz, y tus ojos no verán todo el mal que yo voy a traer sobre este lugar y sobre sus habitantes.'" Y llevaron la respuesta al rey.
29 Entonces el rey mandó reunir a todos los ancianos de Judá y de Jerusalén.