8 Los hijos de la tercera generación que les nazcan podrán entrar en la asamblea del Señor.
9 Cuando salgas como ejército contra tus enemigos, te guardarás de toda cosa mala.
10 Si hay en medio de ti un hombre inmundo a causa de una emisión nocturna, debe salir fuera del campamento; no volverá a entrar al campamento.
11 Pero al llegar la tarde se bañará con agua, y cuando se ponga el sol, podrá entrar de nuevo al campamento.
12 Tendrás también un lugar fuera del campamento y saldrás allí;
13 y tendrás entre tus herramientas una pala, y cuando te sientes allá fuera, cavarás con ella, y te darás vuelta para cubrir tu excremento.
14 Porque el Señor tu Dios anda en medio de tu campamento para librarte y para derrotar a tus enemigos de delante de ti, por tanto, tu campamento debe ser santo; y El no debe ver nada indecente en medio de ti, no sea que se aparte de ti.