57 hacia la placenta que salga de su seno y hacia los hijos que dé a luz; porque se los comerá en secreto por falta de otra cosa, en el asedio y en la angustia con que tu enemigo te oprimirá en tus ciudades.
58 Si no cuidas de poner en práctica todas las palabras de esta ley que están escritas en este libro, temiendo este nombre glorioso y temible, el Señor tu Dios,
59 entonces el Señor hará horribles tus plagas y las plagas de tus descendientes, plagas severas y duraderas, y enfermedades perniciosas y crónicas.
60 Y traerá de nuevo sobre ti todas las enfermedades de Egipto de las cuales tenías temor, y no te dejarán.
61 También toda enfermedad y toda plaga que no están escritas en el libro de esta ley, el Señor traerá sobre ti hasta que seas destruido.
62 Y quedaréis pocos en número, aunque erais multitud como las estrellas del cielo; porque no obedeciste al Señor tu Dios.
63 Y sucederá que tal como el Señor se deleitaba en vosotros para prosperaros y multiplicaros, así el Señor se deleitará en vosotros para haceros perecer y destruiros; y seréis arrancados de la tierra en la cual entráis para poseerla.