22 Y que juzguen ellos al pueblo en todo tiempo; y que traigan a ti todo pleito grave, pero que ellos juzguen todo pleito sencillo. Así será más fácil para ti, y ellos llevarán la carga contigo.
23 Si haces esto, y Dios te lo manda, tú podrás resistir y todo este pueblo por su parte irá en paz a su lugar.
24 Moisés escuchó a su suegro, e hizo todo lo que él había dicho.
25 Y escogió Moisés hombres capaces de entre todo Israel, y los puso por cabezas del pueblo, como jefes de mil, de cien, de cincuenta y de diez.
26 Ellos juzgaban al pueblo en todo tiempo; el pleito difícil lo traían a Moisés, mas todo pleito sencillo lo juzgaban ellos.
27 Y Moisés despidió a su suegro, y éste se fue a su tierra.