23 La convertiré en posesión de erizos y en aguas estancadas, y la barreré con la escoba de la destrucción--declara el Señor de los ejércitos.
24 Ha jurado el Señor de los ejércitos, diciendo: Ciertamente, tal como lo había pensado, así ha sucedido; tal como lo había planeado, así se cumplirá:
25 Quebrantaré a Asiria en mi tierra, y la pisotearé sobre mis montes. Entonces su yugo se les quitará de encima, y su carga será quitada de sus hombros.
26 Este es el plan acordado contra toda la tierra, y esta es la mano que está extendida contra todas las naciones.
27 Si el Señor de los ejércitos lo ha determinado, ¿quién puede frustrarlo? Y en cuanto a su mano extendida, ¿quién puede volverla atrás?
28 El año en que murió el rey Acaz, vino esta profecía:
29 No te alegres, toda tú, Filistea, porque la vara que te hirió esté quebrada; pues de la raíz de la serpiente saldrá una víbora, y su fruto será serpiente voladora.